La semana de la moda de la alta costura de París llegó a su fin, pero nos dejo una colección memorable que te presento a continuación. Cuando escuchamos o vemos Couture se puede sentir un mundo lejano de las esferas sociales que la mayoría de nosotros habitamos. Algo similar a lo que debe que haber sentido la aristócrata anglo-irlandesa Lilah Wingfield, de 23 años, llegando a la India en 1911. Es el personaje que habitó en la mente de Elie Saab para inspiración esta temporada para su colección. Lanzando una propuesta exquisita, femenina, aventurera y actual.
También dio lugar a una propuesta interesante de silueta. Inspirado por el «espíritu explorador» de Wingfield, con ganchillo y encajes en tonos pasteles de lila y malva de cuello alto; vestidos con dibujos de enrejado. Luego vinieron más sorprendentes siluetas: pantalones de crepé de color lila con un babero de salida, cubierto con una chaqueta sin cuello de cristal ahogado y una gorra de béisbol tachonado, y atado con botas de goma y cristal con flecos. Seguramente las princesas de Oriente Medio en primera fila estaban encantadas.
Esta colección es una maravilla para la temporada de premios y con éxito asegurado. Otra delicia fue ver el encaje guipur, para dar la impresión de flores ondeando al viento.
Las clientas de Saab, acuden a él para las miradas de “robo de escena” y con toda la razón ya que últimamente no vemos muchas sorpresas en el circuito de los fashion weeks, por ello este Diseñador Libanés destaca, ya que entiende a la mujer, llena nuestras fantasías y tiene un conocimiento perfecto de como resaltar la silueta.
Besitos!
Deja una respuesta